El universo de los medios de pago electrónicos, billeteras digitales y pagos instantáneos viene creciendo exponencialmente a nivel global, acompañado de cambios estructurales y de una fuerte inclinación de los consumidores hacia estas formas de transaccionar, según la consultora Mc Kinsey.
Si bien el efectivo sigue siendo el medio de pago más usado en los comercios, la Argentina se distingue en la región por ser el país con mayor utilización de las billeteras digitales tanto en el punto de venta como en el comercio electrónico, según el informe “The Global Payments Report 2024″ elaborado por WorldPay. Un reciente informe de IPSOS, también posiciona a Argentina a la vanguardia en pagos en Latinoamérica, consolidándose como el país que lidera el cambio hacia los medios de pago digitales.
Las recientes iniciativas locales de cambios en las regulaciones de las transacciones digitales, convoca a las empresas del sector y a las compañías tecnológicas a que estén listas para lo que se viene en esta materia:
- Apertura de medios de pago en transporte público: A finales de 2024 desembarcó en Argentina la posibilidad de pagar el subte con tarjetas contactless de crédito, débito o prepagas, así como con dispositivos móviles con tecnología NFC. Esta iniciativa simplifica el día a día de las personas, al no tener que preocuparse por cargar la tarjeta SUBE, y habilita a entidades bancarias y billeteras digitales a ofrecer ese servicio dentro de sus plataformas, brindando experiencias de pago más ágiles, simples y seguras. Llega a nuestro país una tendencia global de las grandes ciudades del mundo para administrar de forma abierta e interoperable los pagos en el transporte público.
- Tokenización: Gracias a este nuevo sistema de pago, es posible reemplazar los datos sensibles de una tarjeta bancaria por un código único identificativo, llamado ‘token’, que se emplea durante la transacción digital. De esta forma, se elimina la necesidad de exponer los datos reales de la tarjeta para hacer las operaciones digitales más seguras. Diversas entidades bancarias y empresas que ofrecen soluciones de medios de pago, como Payway por ejemplo, ya están apostando a facilitar la adopción de este nuevo sistema de pago para sus clientes. Este sistema evita fraudes y fortalece la seguridad de las transacciones, beneficiando a los usuarios y clientes.
- Bimonetarismo e integración: En Argentina está siendo fuertemente impulsado a nivel gubernamental y supone que los ciudadanos elijan en qué moneda realizar transacciones. Este esquema representa grandes cambios no solo para las personas, sino también para los comercios y las empresas de medios de pago.
Este modelo ofrece una oportunidad para transformar y potenciar la industria de medios de pago. Plataformas como Decidir, trabajan hoy en soluciones bimonetarias que permiten elegir la moneda de pago, mientras que billeteras digitales, como MercadoPago trabajan en la implementación de CVU (el equivalente virtual al CBU) en dólares. Abre además la puerta a futuras nuevas funcionalidades, tales como Fondos de Inversión en dólares en bancos y billeteras virtuales, etc.
- Aumento en la oferta de cuentas digitales: Existía una tendencia muy marcada a que aquellas personas que cobraban jubilaciones, asignaciones, etc a través de ANSES en una entidad bancaria no elegida por ellos mismos, retiraran la totalidad del cobro por ventanilla en efectivo, representando una amenaza de seguridad así como un vaciamiento de dinero disponible en los bancos. Hoy, el mercado ha sido desregulado y las personas, al poder elegir dónde cobrar sus haberes, eligen por qué medio reciben su dinero, optando en muchos casos por dejarlo disponible en billeteras virtuales.
Esta tendencia representa una oportunidad de incluir a las personas no bancarizadas en el sistema financiero, no solo en Argentina, sino también en Latam. En la región más del 50% de la población no está bancarizada, en países como México esta cifra llega al 80%, por lo que las personas quedan excluidas del sistema financiero, no pudiendo acceder a cuentas y préstamos.
Este escenario obliga a las empresas de medios de pago a desarrollar nuevas soluciones que respondan a esta demanda, para no quedarse afuera de este fenómeno de democratización financiera. - QR multi-adquirente: El objetivo es que desde cualquier QR pueda pagarse con cualquier billetera. Para ello las empresas de medios de pago deben organizarse para decodificar cada QR y encontrar un lenguaje común. Desde el punto de vista tecnológico, esto implica una serie de acuerdos entre organizaciones del sector financiero para interconectar las distintas billeteras.
- Seguridad: Todas las novedades en medios de pago involucran nuestras medidas de ciberseguridad que garanticen la protección de las distintas transacciones en estos nuevos esquemas de pago.
Una de ellas es 3-D Secure, una segunda barrera de autenticación de las transacciones con tarjetas de crédito y débito, que disminuye considerablemente los niveles de fraude e involucra a los comercios, las tarjetas y a los bancos emisores de las mismas. - Click to pay: FIDO2, las passkeys y la identificación biométrica están revolucionando la industria de pagos, al ofrecer autenticación más segura y conveniente. FIDO2 elimina la dependencia de contraseñas tradicionales mediante claves criptográficas únicas almacenadas localmente en dispositivos del usuario. Estas permiten que los usuarios autentiquen pagos usando biometría (huella digital, rostro o PIN seguro), reforzando la seguridad contra fraudes. Asimismo, aseguran transacciones rápidas y seguras, mejoran la experiencia del usuario y cumplen con regulaciones como PSD2.
El mundo financiero digital sigue avanzando y es fundamental estar al tanto de las nuevas tendencias para acompañar el crecimiento. En última instancia, son estas tendencias las que moldearán el futuro financiero.
Las tecnologías de vanguardia están impulsando los medios de pago digitales y demandan profesionales expertos y con experiencia. Esto es, personas capacitadas que puedan hacerle frente a los desafíos que surgen con soluciones rápidas, creativas y exitosas.
La colaboración entre Gobierno, empresas, expertos y consumidores será fundamental para aprovechar al máximo estas innovaciones y asegurar un futuro financiero más inclusivo, eficiente y personalizado.